Afición, nosotros como dice el proverbio árabe, no le daremos a la luna, pero a constancia, nos ganan pocos, y a ganas de futbol, menos, ya sea en La Campana, en Almadén o aquí, donde sea.
Para organizarnos un poco, empezaré por el partido del viernes 16 disputado en La Campana. Si el camino era largo, fue suficiente para ver la distancia, y cargar las pilas con las ganas necesarias, para “ya que hemos venido, vamos a disfrutar, y a ganar”. Y dicho y hecho.
Hace tiempo que dejé de ser objetivo, pero sin duda el mejor partido, de la temporada, contra un equipo muy fuerte, tercero en la clasificación y con dos derrotas y un empate. Muy bueno, mucho toque de balón, y sobre todo juego, mucho juego. Soberbio partido, donde la suerte, que a veces no acompaña, esta vez estuvo de nuestro lado, sobre todo al principio, aunque, bueno, se ganó por méritos propios con un muy buen 1 a 7, que a priori hace que el cuerpo técnico “ se coma los mantecados”. Felicidades a los Alevines, y aún más sabiendo que solo fuimos 11, con un cambio menos.
Casi sin tiempo a digerir la victoria, llegamos a las 21:00, salimos por la mañana con los Alevines y Benjamines de diputación rumbo a Almadén de la Plata, en una excelente y fría mañana de sábado.
En este caso, aún haciendo un partido muy vistoso, y jugando, sin pelotazos largos, conseguimos aguantar, pero (siempre hay un pero) físicamente, no estábamos a la altura, pues el equipo de Almadén, creo que el único que tiene de Alevín, disponía de varios clavales que físicamente estaban muy bien. En fin, el objetivo marcado, de dar minutos en una competición que debe ser el trampolín, se debe de interpretar como mejora y crecimiento de los clavales hacia metas mayores se cumplió.
Mo me gustaría terminar, sin mencionar el comportamiento de todos tanto Alevines y Benjamines, de lo cual no me extraño, pero fue excelente en el viaje, y más con la ilusión de un viaje en autobús.
Un saludo Ramón García.
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